¿NO PUEDO o NO QUIERO?
Frecuentemente
he escuchado a personas decir: “no hagas lo que quieras, has lo que debes
hacer”, pero encuentro que es una contradicción. Una persona no hará lo
que no quiera hacer, aun para hacer lo que ‘debe’, tiene que querer hacerlo, de
lo contrario, no lo hará. “Con todo a ti será tu deseo y tu enseñorearás de él”.
He
visto que es muy importante la cuestión de nuestra voluntad. Si nuestra
voluntad es ponernos bajo la voluntad de Dios, estamos rindiendo ‘voluntariamente’
nuestra voluntad.
El
Gran Mandamiento es: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón…” El corazón está
compuesto por el intelecto, la voluntad,
las emociones y la conciencia.
Considero
que es sumamente importante amar a Dios ‘aun’ con nuestra voluntad. Si nos
damos cuenta, todo lo hacemos porque ‘queremos’ hacerlo. Un ejemplo que suelo
poner son los estudios. Supongamos que no quiero estudiar, simplemente no lo
haría, faltaría a clases, mentiría, hablaría seriamente con mis padres, etc.
Personas que piensan que “tengo que estudiar porque de lo contrario…” es ya de
por si una afirmación voluntaria. Quizá no ‘quiera’ estudiar, pero ‘quiere’ no
aceptar las consecuencias, de esa manera, actúa ‘voluntariamente’.
“La
voluntad es esa capacidad de determinación, es
la capacidad de los seres humanos que les mueve a hacer cosas de manera intencionada,
por encima de las dificultades, los contratiempos y el estado de ánimo”.
Si es una capacidad de ‘los seres humanos’, entonces los
cristianos estamos incluidos! ;) Me incomoda ver cristianos que piensan: ‘Si
Dios quiere voy a hacer esto’ y sin embargo no hacen planes ni actúan. Se dice comúnmente
‘El hombre propone y Dios dispone’, pero muy a menudo Dios no dispone porque el
hombre no propone! Como se supone que Dios va a bendecir una actividad que aún
no haz emprendido? Como es que gente en el ámbito secular puede hacer cosas de
manera ‘intencionada, por encima de las dificultades, los contratiempos
y el estado de ánimo’ y nosotros no? No se supone que tenemos una esperanza
eterna? No se supone que tenemos de nuestro lado al creador del universo? No se
supone que no podemos declararnos ‘en quiebra’ durante esta vida, porque después
de todo nos espera un mejor lugar? Como es que personas ‘enamoradas’ pueden
hacer planes de forma “intencionada, por encima de las
dificultades, los contratiempos y el estado de ánimo”, y nosotros que decimos
estar ´enamorados de Dios´ nos conformamos con su gran amor pero no nos
preocupamos de alguna manera en corresponderle? (…)
Cuando nuestra obra es ‘intencionada’, pase lo que pase,
podremos tener confianza que todo será para bien, y que por nuestra parte, estamos
haciendo realmente todo lo posible para que así sea. No porque sea mérito
nuestro, sino que el real mérito es la sabiduría de nuestro Dios, el cual sabe
conquistar nuestra voluntad para hacerla instrumento útil. Que gran privilegio!
Solo él sabe utilizar nuestra voluntad ‘voluntariamente’ a fin que seamos
instrumentos de honra y no de iniquidad.